Con sus plumas te cubrirá, y debajo de sus alas estarás seguro. Escudo y adarga es su verdad.
-Salmos 91:4-
Allí estamos seguros. Toda cría se siente protegida bajo las alas de su progenitor. Y es instinto simplemente natural e innegable de quien ama "dar refugio", proporcionar seguridad, entregar la vida misma si es preciso, para garantizar la de los suyos. No estamos solos, la verdad de Cristo nos hace vencedores, nada podrá causarnos daño; solo tenemos que asegurarnos de buscar refugio en el lugar correcto. Es necesario saber a "dónde" corremos para ampararnos.
Cuando la tristeza nos invade, ésa impotencia de no poder cambiar las cosas, la frustración de haber intentado todo sin resultados óptimos, la ansiedad de la vida misma que en su alocada rutina tiñe de hastío los mejores propósitos, permite hacer evidente nuestro "refugio en lugares inseguros", aquellos que dependen de nosotros mismos y no de nuestro Padre celestial.
Cuántas veces Dios ha querido amparar a sus hijos como la gallina junta a sus polluelos debajo de sus alas y lo impedimos porque nos olvidamos de Él; ¡muy rápido pasamos por alto sus beneficios! Cuestionamos Su amor en tiempos difíciles, dudamos de su poder, desacatamos su Palabra para entregarnos a pensamientos furtivos y apoyarnos en nuestra propia prudencia, "justificar alejarnos del Señor".
La verdad de Cristo aquella que nos ha hecho libres de pecado debería ser suficiente para no caer en el engaño vertiginoso del enemigo que nos propone refugios falsos, lugares de paso donde puede quedarse enterrada la vida..." morir en las desazones de la existencia".
La decisión es nuestra: Correr a Cristo para refugiarnos y estar seguros bajo las alas del Todopoderoso, allí en su abrigo eterno o ser presa de todo lo que nos asedia para estar en peligro permanente.
¿Y tú, en qué te refugias?
Oración
Padre Celestial, gracias porque podemos correr a Ti; danos fortaleza, determinación, sabiduría para no refugiarnos en la falsedad que el mundo ofrece y separarnos de tu presencia. ¡Sólo contigo habitaremos seguros!
Bajo Sus Alas | Devocionales Cristianos | ALTAR en Español
Comentarios